La situación de la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (EMAPA-I), el estado del proyecto Pesillo – Imbabura, entre otros, fueron los temas que abordó Álvaro Castillo, alcalde de Ibarra. Asimismo, el burgomaestre detalló las acciones referentes a gestión ambiental y planificación urbana que articula la actual administración municipal.
Declaraciones
La primera autoridad cantonal expuso que la EMAPA-I “tiene serios problemas financieros, mantiene una deuda de más de USD 6.4 millones en pago de capital e interés, por la ejecución de la Planta de Tratamiento de Agua Residuales (PTAR)”, que parte de un crédito internacional. Explicó que desde 2020 no se han realizado los pagos respectivos. “Entramos en un proceso de disminución del gasto corriente, donde se ahorrará más de USD 300 mil anuales, significa USD 1.2 millones en cuatro años, que todavía será insuficiente”, acotó en la intervención.
En ese sentido, el directorio se ha reunido constantemente para encontrar una solución factible, de lo contario- dijo Castillo- EMAPA-I dejará de ejecutar obras para ser una empresa enfocada solo en el mantenimiento y operación.
Con respecto al proyecto Pesillo Imbabura, comentó que para 31 de agosto la constructora entregaría la línea de conducción, la captación, tanques de reserva y planta de tratamiento, acorde a los plazos del crédito. Dicha obra solucionaría los problemas de agua en las parroquias de Angochagua, La Esperanza y San Antonio. Sin embargo, el alcalde manifestó que debido a los retrasos, no está seguro que se cumplan con todos los trabajos citados hasta la fecha condicionante.
Planificación
Por otro lado, Castillo también presentó las acciones que planifica la Municipalidad. Destacó que los estudios del control de inundaciones, que costaría alrededor de USD 6 millones, ya fue aceptado por la Corporación Coreana.
De igual manera, ratificó el Plan de Contingencia para el Fenómeno de El Niño, y las medidas que se aplicarían en las parroquias de Lita y La Carolina. Además, se prevé implementar un plan de recolección de residuos sólidos desde la fuente, y que los primeros contenderos se entregarían para el mes de diciembre.