El país nuevamente despertó con un cronograma de suspensión del servicio de energía eléctrica dispuesto para todo el país. Por más de ocho horas al día fueron programados los cortes, distribuidos en diferentes horarios. Todo esto, en medio de una nueva crisis energética ante la falta de lluvias, que la propia ministra de Energía, Andrea Arrobo, desestimó, en entrevista con una radio capitalina.
Le costó el puesto
“Los apagones como tal están descartados, pero sí es importante entender la situación que tenemos”, dijo Arrobo el pasado 12 de abril en radio Sucesos, pero reconoció que la baja generación de energía de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair genera ‘indisponibilidad’ en el sistema eléctrico nacional. Tres días después comenzaron los racionamientos y el Presidente de la República le pidió la renuncia al cargo, siendo la primera baja del gabinete de Noboa, quien además denunció “sabotaje”.
Denuncia sabotaje
“Una vez más, las amenazas del país requieren decisiones fuertes. He declarado emergencia en el sector eléctrico(…)hemos iniciado una investigación por sabotaje en ciertas zonas y plantas eléctricas. De confirmarse estos sabotajes antes de una consulta popular, pediremos a la Fiscalía y al Sistema de Justicia que se aplique todo el peso de la ley a los responsables”, posteó en su red social X.
En un comunicado, las autoridades del sector eléctrico ya no volvieron a hablar de “desconexiones temporales”.