OTAVALO.- Lejos de que el comercio informal en las calles céntricas de Otavalo se erradique, en los últimos tiempos se ha notado un incremento. Decenas de vendedores se asientan diariamente en las veredas con infinidad de productos para ofertar a la ciudadanía.
Esta actividad ha sido rechazada por la población en reiteradas ocasiones, tomando en cuenta que se genera un desorden público, pues los comerciantes dificultan el tránsito de peatones e incluso vehículos, ya que colocan sus coches, carretas o simplemente sus recipientes plásticos en las calles.
Pero esto no es todo, su actividad comercial adicionalmente perjudicaría a los comerciantes formales de los mercados de la ciudad, especialmente del 24 de Mayo y del Copacabana, debido a que la gente compraría lo que necesita allí, a la mano, dejando de acudir a estos centros de expendio que están un poco más retirados.
En este contexto, los señalados, coinciden en que se ven obligados a salir a las calles a ganarse el pan de cada día de esta manera, pues las fuentes de trabajo escasean, y no pueden dejar de alimentar a sus familias.
Este es el caso de Rosa Moreta, mujer kichwa de la tercera edad, oriunda de la comunidad San Juan Alto, quien aseguró que sale a las 05:00 de la mañana, todos los días, con sus productos alimenticios a la calle.
“A veces se vende y otras no, por lo cual a veces comemos, y asimismo, otras no. Igual siempre toca salir a intentar. No tenemos un trabajo fijo, por eso nos quedamos buscando clientes hasta las siete de la noche más o menos”, relató.
Patricio Guerra, recientemente posesionado como director de seguridad ciudadana del Municipio de Otavalo, en la vereda del frente, informó que se está generando un nuevo plan de seguridad junto a los agentes de control municipal, a fin de contrarrestar esta situación.
“Estamos empezando a determinar los sectores que más dificultad presentan para controlar a los vendedores autónomos. Sabemos que la situación económica del país es bastante complicada, sin embargo queremos capacitarlos, categorizarlos, así como darles horarios y lugares para trabajar, para que sepan en dónde estar, lo cual aportará al ordenamiento de la ciudad”, dijo.
Por otra parte, Guerra también se refirió a que los vendedores se estarían amparando hoy por hoy en la ley de vendedores autónomos, para que no se les retire su mercadería en los operativos.
“Esta ley estaba promulgada desde el 2011, pero fue vetada en aquellos tiempos. Ahora la quiere ratificar la Asamblea Nacional. Obviamente nosotros no podemos quitarles la mercadería, pero sí podemos hacer autoinicios con la Comisaría Municipal, que será la encargada de sancionar cuando la situación lo amerite”, señaló.
En la parte final, hizo un llamado a la conciencia ciudadana, a fin de que no adquiera productos en la calle. “Si dejamos de comprar, ellos van a dejar de salir”, aseguró, para posteriormente acotar que inclusive existe riesgo sanitario en algunos productos, como los pollos por ejemplo, que los sacan a la venta en baldes.
