Con maquinaria pesada se limpian las calles de Ibarra, las riberas, las esquinas y frente a las viviendas se observan todavía montículos de lodo y escombros.
Según reportes oficiales, 13 lugares de la Ciudad Blanca fueron afectados por la lluvia del fin de semana.
En esta ocasión, no se registraron familias damnificadas. Personal de la EMAPAI realiza trabajos de limpieza y arreglo de tuberías de agua potable, que fueron afectadas por la creciente del caudal en las quebradas.
El panorama de las riberas
Para Carmen Vinueza, moradora de la av. Mariano Acosta, el problema de las inundaciones muestra la falta de un proyecto integral para el sistema de alcantarillado y drenaje.
“Este sector es el más afectado, yo vivo aquí más de 30 años y es una zozobra el invierno para nosotros, ahora limpiamos el lodo, pero con los días se seca y el polvo afecta a nuestras vías respiratorias”, comentó.
Durante el primer trimestre del año, Ibarra registró dos fuertes inundaciones, la primera ocurrió en febrero y el barrio más afectado fue Jardines de Odila, pues más de 10 familias perdieron sus bienes materiales.
Abel Anrango, técnico de la EMAPAI, en declaraciones anteriores explicó que la entidad trabaja con un cronograma de limpieza, se han atendido 150 kilómetros de red y se aseó más de 9 mil sumideros.
Indicó que el problema de las inundaciones no se debe a la falta de alcantarillado pluvial “Así tengamos alcantarillados pluviales, si no controlamos los escombros de las partes altas, no habrá alcantarillado pluvial que soporte la cantidad de material arrastrado”.
De igual manera, explicó que las aberturas de los sumideros son pequeñas, razón por la cual, no puede ingresar lodo, piedras y basura.
Acotó que es necesario que el Ministerio de Ambiente debe controlar el relleno de quebradas en las riberas de las partes altas del Imbabura.
La Municipalidad de Ibarra destinó USD 100 mil para la actualización del Estudio del Plan de Control de Inundaciones, el mismo, se elaboró hace 10 años.
“El estudio con la actualización alcanzará unos USD 8 millones en la construcción, la actualización debe ser minucioso y técnico”, dijo Anrango.