Gabriel Alcívar, oriundo del cantón Chone, tiene claro su objetivo para el día de hoy, 30 de septiembre: mantener su nombramiento y título de “Zorro Master” obtenido en 2022, en la fiesta hípica más importante y tradicional de la ciudad de Ibarra.
Los jinetes tendrán en mente atrapar a Alcívar, quien está preparado y con los mejores ánimos para esta edición 51 de la Cacería del Zorro. “Llegué con la maleta llena de ilusiones, de logros. Defender el título no será fácil, pero daré el mejor espectáculo”.
Experiencia
“Desde chico empecé a montar caballos, lo que me permitió convertirme en un jinete profesional y de élite”. La reconocida Cacería del Zorro llamó su atención, y en 2016 arribó a Ibarra para experimentar su primera participación en la competencia hípica.
“Estuve en el desfile, pero cuando llegué a los peñaroles tuve que rezar como unos 10 Ave Marías. En ese momento, me llené de confianza y logré atravesar el obstáculo. También participe al siguiente año, me dijeron que tenía la chispa para estos eventos, y justamente logre mi primer reconocimiento en la ciudad”.
Preparación
Alcívar está en tierras ibarreñas desde aproximadamente una semana, con el objetivo de aclimatarse a la localidad y realizar un proceso de preparación. “Hay que conocer al equino, saber qué movimiento no le gustan, cómo manejarse. Generar una conexión con el animal. Es la parte fundamental, que todo jinete realiza”.
Para esta participación, buscó un caballo resistente, es decir con características físicas que afronten el trajín del evento, le permita culminar el recorrido y, en especial, mantener el honor del “Zorro Master” por un año más.
“Este logro no lo conseguí de la noche a la mañana. Va más allá del valor económico. Un Zorro está preparado en lo físico y mental. Sobre todo, el peso del jinete, porque para montar un caballo de carrera debe estar en los 51 a 54 kilos. Por experiencia, yo consumo fruta y agua días antes”.
Expectativa
Al finalizar, Alcívar envió un saludo a la ciudad por sus 417 años de fundación. “Espero disfrutar mi estadía con un logro más en mi carrera. Llevar el reconocimiento de la cacería a mi Chone, Manabí. Decir que Ibarra se ha convertido en mi segunda casa. Conozco a mucha gente que son parte de mi vida, los llevo en mi corazón”.