La historia de Manuel Portilla tiene su atractivo. San Pedro de Huaca, ‘Tierra de Encanto’, está de fiesta por sus 28 años de cantonización y entre sus actividades está el Festival de Castillos Artesanales, a realizarse este domingo, a las 19:00, en el parque Simón Bolívar. Pero para hablar de los tradicionales castillos gigantes, necesariamente se debe retroceder en el tiempo y mencionar a Don Luis Alejandro Portilla y su esposa Ester Martínez, pioneros de esta actividad, desde hace un siglo, que es símbolo de la identidad huaqueña.
Los herederos
Arnulfo, Manuel y Flor Portilla son tres hermanos. Ellos heredaron la habilidad de elaborar los castillos de luces y pirotecnia que iluminan las noches, de la mayoría de fiestas tradicionales, en el norte del país.
Manuel, el segundo en edad cuenta que comenzó a fabricar estas estructuras desde su adolescencia y con el pasar del tiempo se han ido perfeccionando recibiendo talleres de capacitación todo el tiermpo.
“Somos los únicos (hermanos Portilla) que elaboramos castillos en el norte del país con todos los permisos otorgado por el Ejército Ecuatoriano, el área de manejo de explosivos y certificados como artesanos”.
Hasta 20 gigantes
“Una vez llegué a levantar 20 castillos para las fiestas de la Virgen de la Purita aquí en Huaca. Enero es el mejor mes para nosotros; le siguen mayo, junio, julio agosto, septiembre y octubre. En noviembre se descansa un poco, se hace uno o dos al mes y llega diciembre en donde se supera los 12 castillos.
“Hay que tener mucho cuidado para elaborarlos ya que implica un riesgo, lo reconoce Manuel, quien hace 6 años tuvo un accidente con pólvora, pero que no pasó a mayores. Manuel Portilla tiene 56 años y lleva desde los 15 construyendo estos “gigantes de luces”.
Se los conoce así porque el más pequeño alcanza una altura de 8 metros por 3 de ancho y el más grande alcanza los 12 metros de alto por 4 de ancho.
Manuel cuenta que ha viajado con sus creaciones hasta Loja, para honrar a la Virgen del Cisne, hasta Manabí, Imbabura, Pichincha y por supuesto todo Carchi.
Desde la muerte de sus padres, los tres hermanos trabajan por su cuenta y tienen sus propios clientes. Por ejemplo el mayor Arnulfo tiene su taller y sus castillos se encienden en Imbabura en las fiestas de Caranqui.
Otras actividades
Como todo buen carchense, la agricultura forma parte de su vida. Cuando no está trabajando en los castillos, dedica su tiempo a cultivar la tierra. “Me dedico a la agricultura, siembro y cosecho algunos quintales de papas para comercio interno”. Don Manuel, junto a sus hermanos, participará del Festival de Castillos Artesanales y que otorgará premios a los más vistosos.