Con apenas 21 años, nuestra atleta Kiara Rodríguez, ha demostrado que no existen límites para los sueños cuando se entrena con pasión y determinación. Su reciente victoria en los Juegos Paralímpicos, donde logró el oro y rompió el récord paralímpico con un salto de 6.05 metros, es un hito no solo para ella, sino para todo Ecuador. Su camino comenzó en Tokio 2020+1, donde, lejos de conformarse con un bronce, decidió que entrenaría más duro para que nadie pudiera superarla.Este logro no solo la enaltece como deportista, sino que la convierte en un símbolo de esfuerzo y perseverancia para todos los jóvenes atletas de nuestro país. Su dedicatoria a Yulimar Rojas, su ídolo, muestra su humildad y capacidad de reconocer a quienes la inspiran.Es un recordatorio de que el trabajo arduo, la disciplina y el amor por lo que hacemos nos llevan a lo más alto. Ecuador tiene en ella una inspiración viva para futuras generaciones.