El automóvil marca Kia, de placa TKB-4069, del padre Enrique Fabián Arcos Sevilla fue hallado completamente quemado. El hecho sucedió lunes último, tres días después que el religioso fue encontrado sin vida en una quebrada.
El sacerdorte, que tenía 53 años y llevaba 26 como pastor, había sido reportado como desaparecido el pasado miércoles 30 de octubre, en la ciudadela Cristóbal Colón de Ambato. Ante este hecho, la Policía Nacional realizó cerca de una veintena de allanamientos en la búsqueda de pistas, y centró sus esfuerzos en localizar el vehículo en el que el padre se desplazaba.
Durante las diligencias, las autoridades hallaron el cadáver de Arcos en el sector de Panzaleo, en la provincia de Cotopaxi. Según la información preliminar, el cuerpo presentaba signos de violencia y fue encontrado en la carretera, con las manos atadas con una cuerda.
El cuerpo del religioso fue trasladado a la morgue local, donde se le realizará la autopsia correspondiente para determinar la causa exacta de su muerte. Mientras que el vehículo del sacerdote fue incinerado y abandonado en una zona rural de la parroquia Lloa, al sur de la ciudad de Quito. WB