Con un acto oficial, autoridades, directivos y moradores recibieron la obra de regeneración del Parque Familiar y canchas deportivas del barrio Cuesaca, ejecutada por el Consejo Noruego para Refugiados en coordinación con la Alcaldía de Bolívar.
Hasta hace poco, la maleza y el deterioro se habían tomado el espacio comunal donde solamente existía la edificación en la que alguna vez funcionó la guardería infantil.
La municipalidad de Bolívar informó que contar con un lugar digno para que la integración de los vecinos y esparcimiento de los más pequeños era una necesidad apremiante.
Gracias a la gestión de la primera autoridad cantonal y al trabajo humanitario que realiza el Consejo Noruego para Refugiados se consiguió la construcción de un moderno y vistoso parque con áreas verdes y juegos infantiles, así como el arreglo de la casa comunal y las canchas de este populoso sector de la urbe bolivarense.
Una vez concluidos los trabajos en la nueva infraestructura, el fin de semana pasado se desarrolló el acto oficial de inauguración donde participaron moradores, autoridades y funcionarios de las entidades cooperantes.
El representante del Consejo Noruego para Refugiados, Pablo Rodríguez, explicó sobre la labor que la organización realiza en favor de la población en condición de movilidad y de los territorios de acogida.
De igual manera, expuso sobre el acercamiento y coordinación con la municipalidad para poner en marcha este proyecto. Por su parte, Livardo Benalcázar, alcalde de Bolívar, dijo que todos los seres humanos merecen dignidad y respeto sin discriminación. “El barrio ha acogido a muchas personas de diferentes nacionalidades desde hace mucho tiempo, lo que ha permitido una convivencia fraterna. Hoy tenemos un espacio para compartir”.