OTAVALO.- El último año, al igual que su antecesor, se ha caracterizado a nivel global por el surgimiento de la pandemia mundial por el Covid 19, emergencia sanitaria que prácticamente golpeó a la economía de diversas instancias privadas y públicas.
En este contexto, el Gobierno Autónomo Descentralizado Municipal de Otavalo, según han marcado sus autoridades, fue uno de los organismos que más sufrió cortes presupuestarios estatales, al igual que sus homólogos de otros cantones, lo cual mermó su planificación laboral.
Levantamiento
En los días más álgidos de la pandemia, la Municipalidad habría dado prioridad al cuidado de la ciudadanía, a través de acciones enfocadas a la prevención, y conforme el panorama iba mejorando, también se continuó trabajando con las obras de cemento.
Es así que, como parte de este resurgimiento, se ejecutaron varios proyectos, como: ampliación de sistemas de agua potable y alcantarillados; adoquinados, aceras, bordillos y cunetas; construcción del Parque de la Parroquia de San José de Quichinche; construcción de la Plaza Cívica – Los Portales (en proceso), construcción del Proyecto Ecoñán, construcción de Plantas de Tratamiento; adquisición de nuevo equipo caminero, mantenimiento de caminos viales y mantenimiento de edificios municipales (Kinti Wasi, Centro Gustavo Alfredo Jácome – Casa de la Juventud, Mercado Imbaya y Mercado Copacabana); recuperación de Los Portales, soterramiento de cables y sistema eléctrico; construcción de los muros de anclaje y rehabilitación de la fachada del ex Colegio Jacinto Collahuazo; iluminación de los estadios de Peguche y Agato; entre otros.
Todo esto, supuso una ejecución presupuestaria del 80%, que a decir de Patricio Lema, analista de la Jefatura de Seguimiento y Evaluación del GAD-O, es un indicador bastante bueno.
Críticas ciudadanas
Más allá del aspecto positivo, este último año de gestión municipal, también ha sido objeto de varias críticas ciudadanas, en cuanto a temáticas como la misma construcción de la Plaza Cívica, la cual ha demorado su cristalización por diversos motivos, de manera especial vinculados a procesos de contratación pública, según se conoció en su momento.
Al respecto, la población se ha expresado en los medios de comunicación locales, exigiendo que la obra avance y sea inaugurada pronto, pues los comerciantes por ejemplo, llevan años de bajas ventas en sus negocios, algo que era impensado anteriormente, pues con la presencia del antiguo Mercado 24 de Mayo allí, había mucha bonanza.
Proyecto Loma Viva
Otro de los temas que estuvo bajo la lupa durante el 2021 – 2022, es el proyecto ambiental “Loma Viva San Vicente”, mediante el cual el Cabildo Municipal deforestó un estimado de 5 hectáreas de bosque, para sembrar plantas nativas.
El impacto visual que esta acción generó en varios otavaleños ha promovido incluso que el activista ambiental, Raúl Chávez, en coordinación con ciudadanos, impulsen un proyecto de ordenanza para la declaratoria de este espacio, y su similar, la Loma Cotama, como “Áreas de Conservación y Uso Sustentable”, para blindarlas de futuras deforestaciones. Se conoce que para ello, ya contarían con 500 firmas de respaldo recogidas, según Chávez.
Mercado 24 de Mayo
Las bajas ventas en el principal centro de expendio de la ciudad, es otra de las “deudas pendientes” del Municipio. En el periodo 2021, algunos vendedores hicieron denuncias públicas sobre lo que consideran una preocupante situación, el abandono de puestos.
El argumento siempre fue el mismo, el GAD-O debe controlar a los comerciantes informales en las calles, pues ellos perjudicarían las ventas en el mercado. Paralelamente, han solicitado la implementación de estrategias de promoción.