El papa Francisco, de 88 años, ha sido ingresado nuevamente en el Policlínico Agostino Gemelli de Roma debido a una bronquitis. Esta afección respiratoria lo aqueja cada invierno y ha requerido hospitalización en varias ocasiones anteriores.
Ingreso hospitalario tras exámenes médicos
Según un comunicado emitido por el Vaticano, el sumo pontífice fue trasladado al hospital después de cumplir con sus audiencias matutinas. En la nota oficial se menciona que su ingreso obedece a la necesidad de realizarle exámenes diagnósticos y continuar su tratamiento en un entorno hospitalario. No se ha especificado el tiempo que permanecerá internado.
Problemas de salud en las últimas semanas
Desde principios de febrero, el papa Francisco había manifestado síntomas de un fuerte resfriado, como él mismo comentó durante la audiencia general del 5 de febrero. Debido a su estado de salud, optó por mantener sus reuniones en su residencia, la Casa Santa Marta, evitando traslados innecesarios al palacio pontificio para no agravar su condición.
El pasado domingo 9 de febrero, pese a su malestar, decidió presidir la misa del Jubileo de las fuerzas armadas, la policía y la seguridad en la Plaza de San Pedro. Durante la homilía, intentó leer el texto, pero la dificultad para respirar lo obligó a delegar la lectura a un colaborador. «Pido disculpas y pido al maestro que continúe leyendo porque me falta el aire», expresó en ese momento.
Agenda pontificia afectada
La hospitalización del papa coincide con una agenda repleta de compromisos para los próximos días. Se esperaba su participación en la audiencia jubilar del sábado, la misa de Jubileo de los Artistas el domingo y una visita el lunes a los estudios de Cinecittà, donde tenía previsto un encuentro con representantes del mundo del arte.