Tan solo cuatro meses duró la gestión de Érika Machado como directora del Centro de Privación de Libertad.
Su salida se dio una semana, después que EL NORTE, recibió una queja de una exfuncionaria del CPL por discriminación. Y tres días después de una requisa que se realizó al interior del centro penitenciario.
El paso de Machado por el CPL fue fugaz. Lo más mediático de su gestión, fue el nombramiento en marzo que duró una semana en funciones y que por una acción de protección de la exdirectora Mireya Argoti quedó sin efecto.
Luego de idas y vueltas, regresó en julio y se quedó hasta el 29 de noviembre. En aquel entonces Pablo Ramírez, era el director nacional del SNAI.
Aunque Machado hizo oficial su renuncia en redes sociales, argumentando que dejaba el cargo por motivos personales. Todo parece indicar que su salida del cargo estaba sentenciada con anterioridad.
Ayer 30 de noviembre, Julio César Novoa Ramos, mayor de Policía, se posesionó como el nuevo director del CPL. El nuevo funcionario quien es Mayor retirado de la Policía Nacional, comprometió su apoyo para trabajar en la consolidación institucional. Actualmente uno de los problemas que afronta el centro penitenciario es la sobre población carcelaria.
Durante el actual gobierno de Guillermo Lasso, desde mayo de 2021, Ecuador ha afrontado cinco masacres al interior de las cárceles, que significaron 276 personas asesinadas. Pero, la peor crisis penitenciaria de la historia empezó hace tres años, cuando el expresidente Lenín Moreno declaró en emergencia a las prisiones en mayo de 2019.
