Diomira Ordoñez, es oriunda del cantón Lago Agrio, de la provincia de Sucumbíos. Ella es una de las participantes de la feria productiva ‘Frontera Norte: Territorio de Desarrollo y Paz 2023’. En este espacio expone sus chocolates en barra, los cuales tienen un precio individual de USD 1.50, y que son producidos por la Asociación de Mujeres ‘Pura Vida’. Las integrantes de esta agrupación se encargan del cultivo y cosecha de la materia prima, que en este caso es el cacao. También, del empaquetado y promoción del producto.
En ese sentido, otras 30 organizaciones agroecológicas se congregan en el Centro Cultural El Cuartel, donde exponen sus emprendimientos y productos, que ofertan en diferentes territorios, como Sucumbíos, Esmeraldas, Carchi e Imbabura. La mayoría cuenta con una marca registrada, un proceso de producción, empacado y espacios de comercialización, los cuales son resultado de las capacitaciones e inversión del proyecto Frontera Norte, que se ejecuta desde aproximadamente tres años en estas zonas.
Producción
La feria productiva se articula al proyecto que desarrolla la Unión Europea (EU), Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y la Mancomunidad del Norte en las provincias antes mencionadas. Según Jordy Galbe, responsable del programa de la AECID en Ecuador, trabajaron en tres ejes: económica y productivas, servicios básicos en comunidades rurales e inserción laboral en jóvenes. “Vamos a ver los resultados e impactos, donde se palpará los productos de las cadenas de valor, que se han desarrollado con certificación orgánica y agroecológica”, agregó.
Igualmente, José María Medina, jefe de cooperación de la UE en Ecuador, comentó que “el proyecto de Frontera Norte es el más grande que se tiene en el territorio ecuatoriano, especialmente, con asistencias económicas no reembolsable”
Liliana Vernaza, de la provincia de Esmeraldas, es una las fundadoras del emprendimiento ‘Bambú San Lorenzo’, y beneficiará de las capacitaciones del proyecto Frontera Norte. Desde hace 5 años realiza, junto a 7 personas más, artículos como mueblerías, utensilios y adornos fabricados totalmente con bambú. Esta actividad ha permitido que los integrantes se solventen económicamente y tengan planes a futuro de expandir su catálogo y punto de comercio.