Con la llegada del verano, o la denominada época seca, la probabilidad de incendios forestales aumenta aproximadamente el doble. En especial, en las zonas altas, como lo son los páramos.
Según el informe de la Dirección de Monitoreo de Eventos Adversos, en lo que va del año en Ecuador se han registrado 317 incendios forestales, de los cuales 18 corresponden a Imbabura.
De igual manera, los mismos datos reflejan que la provincia fue la más afectada en lo que respecta a la cobertura quemada, con una extensión de 1180, 81 hectáreas. Afortunadamente, en estos sucesos no se registraron personas heridas, bienes destruidos o cultivos perdidos.
Razones
Pamela Chamorro, jefe del Cuerpo de Bomberos de Pimampiro, comentó que el origen para un incendio forestal es variado, y que predecirlo es imposible.
“En ciertos casos coexisten y dependen de la realidad local, pero definitivamente tienen un denominador común: el ser humano y su gestión del paisaje. La mayoría está asociada a las prácticas agrícolas que salen de control por la pérdida de las tradiciones culturales con respecto al uso del fuego, los problemas de tenencia de tierra, el cambio de uso de suelo para ganadería tradicional, por la cacería ilegal, el uso del fuego en apicultura, la piromanía y procesos naturales muy esporádicos como la caída de rayos”, explicó.
Es importante mencionar que en el pasado mes de mayo se registró un incendio de gran magnitud en la provincia. Específicamente, en el sector de Chinchivi y cerro Pilabo, dentro de los páramos de Piñán, que pertenecen al Parque Nacional Cotacachi Cayapas. De acuerdo a la Secretaría de Gestión de Riesgos y la Coordinación del Ministerio de Ambiente y Transición Ecológica (MAATE) de la Zona 1, fueron afectadas 1131.58 hectáreas.
“Lo que sí está claro es que cada vez los veranos son más intensos y los períodos de sequía más prolongados. La radiación solar al combinarse con altitudes sobre los tres mil metros, aceleran la pérdida de humedad relativa y donde cada chispa podría ocasionar un potencial incendio forestal”, dijo Giovanni Zamora, jefe del Cuerpo de Bomberos de Cotacahi.
Chamorro indicó que hay múltiples acciones para mitigar esta problemática, como campañas informativas y concientización. “En Pimampiro se articula con los moradores más cercanos, donde se produce un incendio, ellos son los primeros en actuar hasta nuestra llegada, por supuesto que fueron capacitad. Existen mejores resultados cuando las respuestas a la problemática son propuestas por la sociedad, y si a estas se suman las instituciones”, finalizó.
