Sixto López Pineda resultó ser un personaje multifacético. Este docente, padre de familia y exárbitro profesional también es un coleccionista. Él lleva más de la mitad de su vida coleccionando una serie de objetos. Sin embargo, su colección más preciada es una de llaveros, ya que tiene alrededor de 5000 de estos artículos.
“Aproximadamente tengo unos 32 años coleccionando. Mi afición por coleccionar llaveros empezó en mi juventud. Tenía una motocicleta y había amigos que me pedían una vuelta en la moto y les decía bueno, pero a cambio de un llavero”, mencionó Sixto.
En el primer piso de la casa de la familia López Granizo, quienes residen en la parroquia La Esperanza, adecuaron un espacio de unos 15 metros de largo por cinco de ancho, para que Sixto coloque, de forma muy ordenada, sus 5 000 llaveros. Tiene artículos de más de 20 naciones de cinco continentes del planeta. Entre ellas están: Estados Unidos, México, Nicaragua, Colombia, Belice, Jamaica, El Salvador, Costa Rica, España, Portugal, Omán, Malasia, Marruecos, La India.
“Algo muy curioso, tengo un llavero de Australia, un país al que es muy difícil llegar para miles de las personas que vivimos en esta parte del mundo, pero tengo uno”, explicó el coleccionista.
Para él, cada uno de los llaveros que son parte de su “gigantesca” colección es especial. Sin embargo, existe uno con el que tiene un mayor apego. Doña Carmen Pineda (+), su madre, tenía que consumir un medicamento muy difícil de encontrar en el país y de elevado costo. El coleccionista hizo de ese frasco un llavero, que está en una de las vitrinas que cuelgan en las paredes de una habitación.
Sus amigos muy cercanos, que tienen la posibilidad de salir del país, a su regreso casi siempre regresan con un llavero para Sixto. Otros que proporcionan de llaveros a su colección son sus hijos: Israel, Mateo y Martín. Este último, quien es ciclista profesional (es parte del Astana Qazaqstan Team), tiene la posibilidad de correr en varios países del mundo, especialmente en Europa. Cada vez que puede aprovecha la oportunidad para traer llaveros para su papá.
Nancy Granizo, también docente, es la esposa de Sixto. “Sixto ha sido y es constante en el tema de buscar los llaveros. Yo le colaboro, le ayudo. Si nos vamos de viaje, le traemos los llaveros. También lo hacen mis hijos y las amigas que tengo, sobre todo las que conocen que él colecciona llaveros”, explicó Nancy.
“Admiro la constancia y la perseverancia que él tiene. Estamos casados más de 30 años y esto continúa (la colección de llaveros y cada vez irá aumentando”, añadió Nancy Granizo.
También mencionó que tienen más de 20 vitrinas y, dependiendo del tamaño de cada llavero, en cada una pueden organizarse entre 100 y 120 de estos artículos, que muchas personas les regala como recuerdo de los viajes que realizan o los sitios que visitan dentro y fuera del territorio ecuatoriano.
Mateo es el menor de los hijos de Sixto y Nancy. Él también es ciclista y hace poco estuvo realizando una pasantía en un equipo Español.
Mateo no desaprovechó la oportunidad para regresar a casa con unos cuantos llaveros para su progenitor. Él también admira la pasión de coleccionar llaveros que tiene su papá.