IBARRA.- Con puro arte, así es como se labra su propio camino el artista James Verdugo. Él nació en el sur de Colombia, pero desde hace 8 años reside en la capital imbabureña.
“Anteriormente solo era un hobbie, lo hacía esporádicamente porque me gustaba, pero no pensaba vivir de ello. Me había acostumbrado a trabajar 12 horas diarias en otra rama muy aparte a las artes. Sin embargo, nunca me sentí libre, hasta decidirme por hacer lo que más me gusta”, mencionó James en una entrevista anterior con Diario El Norte.
“Obviamente con demasiados temores, ya que imagínate: tener tu familia, tu esposa, tres hijos y de un momento a otro cortar con muchas comodidades eso fue muy difícil, porque los que viven del arte saben que este camino no es fácil y yo lo he podido vivir en carne propia”, añadió el artista, quien se formó en el Instituto de Artes Plásticas Daniel Reyes.
Ahora, todas esas batallas en las que ha dado una dura lucha le están dando resultado y está cosechando lo que sembró. En julio pasado, a este especialista en artes plásticas le encomendaron la tarea de inmortalizar en una pintura a uno de los destacados jugadores que tiene el país cafetero.
Se trata de Jackson Martínez, quien, además de jugar con la camiseta de la selección de su país, también lo hizo para dos importantes clubes del Viejo Continente. Se trata del Porto (Portugal) y Atlético Madrid (España).
James, quien tuvo la oportunidad de compartir momentos agradables con Martínez, trabajó a contrarreloj en la obra que entregó personalmente al deportista Colombiano.
“Es bien significativo para mí, la obra que le hice a Jackson porque yo hace años he venido viendo el proceso evolutivo no solo como un futbolista”, explicó el artista.
También mencionó que lo que más tienen en común con Jackson Martínez es que son hermanos en Cristo, ya que tuvieron la oportunidad de recibir a Jesucristo en sus corazones no como una religión, sino como un estilo de vida.
Anteriormente, como parte de su preparación, James realizó otras pinturas de deportistas. Entre otros, los también futbolistas Radamel Falcao García y Juan Fernando Quintero.
Sin embargo, hizo y entregó a Jackson tiene un valor muy especial, ya que se le han abierto otras importantes puertas.
Martínez, quien ahora se dedica a cantar rap cristiano, pero que en 2023 podría volver a jugar fútbol a nivel profesional, empezó a compartir el trabajo de James.
Eso sirvió para que otras figuras del deporte y la música pregunten por él y por sus obras. Por ejemplo: Teófilo Gutiérrez, Juan Fernando Quintero y Natan El Profeta.
“La intención es que el arte también pueda ganar más cancha, amplitud y que bonito hacerlo desde Ecuador, desde este país porque lo amo. Dios me dio la oportunidad de quedarme aquí y estoy muy agradecido. Mi hijo, el menor, es ecuatoriano y eso me hizo ecuatoriano a mí también”, dijo James.
Las puertas se continúan abriendo. Es mucha paciencia, pasos cortos, pero firmes”, sentenció James Verdugo, un artista que se decidió por perseguir sus sueños y, ahora, se están haciendo realidad.