El legado de Marianita Minda quedó perennizado.
La mujer afro e ícono de las negritudes del norte del país ya tiene su busto, una obra que rinde un justo tributo a la mujer que durante toda su vida aportó al crecimiento y desarrollo del pueblo afrodescendiente, uno de los marginados históricamente por los gobiernos de turno.
De origen humilde, su vida siempre transcurrió con mucha dedicación y esfuerzo, por ello el homenaje, que le da la actual ministración municipal marca un gran precedente y una responsabilidad mayor para los colectivos afros de Imbabura.
Desde hoy, el parque de la Mujer, ubicado en la avenida Fray Vacas Galindo y Avenida Cristóbal Troya.