En el marco de la conmemoración del Día Mundial del Agua, la Pontificia Universidad Católica del Ecuador Sede Ibarra (PUCE-I) acogió un significativo seminario en colaboración con el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica y Fundación ALTRÓPICO. Bajo el lema ‘Agua para la Paz’, que reunió a destacados expertos, ingenieros y funcionarios gubernamentales en un esfuerzo conjunto por abordar los desafíos y oportunidades en la gestión del agua.
Relevancia
Uno de los puntos destacados del seminario fue la presentación de iniciativas innovadoras y proyectos de investigación desarrollados por personas de distintas partes del país enfocados en la conservación y el uso sostenible del agua en diversas regiones del país.
Estas propuestas recibieron elogios por su enfoque práctico y su contribución al desarrollo sostenible. La ponencia refleja el creciente interés y la voluntad de la sociedad ecuatoriana de enfrentar los desafíos ambientales con determinación y colaboración.
Con eventos como este, se fortalece el camino hacia un futuro más justo, equitativo y respetuoso con nuestro planeta y sus recursos naturales. Durante la jornada, se llevaron a cabo diversas ponencias sobre dos temas cruciales como son las áreas de protección hídricas y la gobernanza del agua.
Ponentes
Los ponentes tuvieron la oportunidad de compartir experiencias, conocimientos y mejores prácticas en la gestión integral del agua, así como de analizar los desafíos específicos que enfrenta Ecuador en este ámbito.
Inauguración
El acto inaugural estuvo presidido por la primera autoridad de la PUCE-I, Jesús Muñoz Díaz, seguido del tecnólogo Cristhian Soria, Director Zonal 1 del Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, y Mauricio Levi, Coordinador Zonal de La Fundación ALTRÓPICO, quienes destacaron la importancia de este encuentro en el contexto de la crisis climática y la urgente necesidad de preservar de manera conjunta el recurso
“El agua puede crear paz o desencadenar conflictos. Cuando el agua escasea o está contaminada, o cuando las personas tienen un acceso desigual o nulo, pueden aumentar las tensiones entre comunidades y países”, señala la ONU.

