Una nube de humo, acompañada de explosiones, sorprendió a los habitantes de El Cielito, uno de los 22 caseríos de la parroquia Jijón y Caamaño, en el cantón Mira, provincia del Carchi.
Personal especializado, de las Fuerzas Armadas, colocó cargas de dinamita y realizó explosiones controladas. De esta manera, se eliminaron cuatro bocaminas abiertas por buscadores de oro, en las faldas de una montaña.
No hubo detenidos
El campamento de mineros informales fue descubierto durante un patrullaje que realizaban miembros del Batallón de Infantería Motorizada 39 Mayor Galo Molína, de Tulcán.
Esta es una de las unidades que integran la Brigada de Infantería 31 Andes y que, entre sus misiones está el combate a la minería ilegal.
El campamento de El Cielito estaba abandonado, por lo que no hubo detenidos. Según fuentes de Inteligencia, los mineros ingresan en la noche, para realizar sus actividades.
Pero, a medida que llega el día, se retiran. Esa sería la táctica que utilizan las personas dedicadas a la minería informal en Carchi e Imbabura. Sin embargo, también se considera que tiene anillos de seguridad que informan cuando ingresa personal de la fuerza pública, para realizar controles.
Zona concesionada
La explotación de oro en el caserío El Cielito se remonta al 2017. Un año antes, mientras se abría un camino hacia la localidad, se dieron cuenta que las rocas tenían partículas de oro.
Luego de ello, la zona se vio invadida de mineros que llegaron desde Imbabura, Zaruma, Esmeraldas, Azuay, entre otras. La zona minera de El Cielito está concesionada a las empresas Sol Gold y filiales de la Carnegie Ridge Resources S.A.
Control permanente
Los controles de la fuerza pública a la minería ilegal se volvieron una actividad sin final. Se considera que los buscadores de oro que incursionan en El Cielito son los mismos que operan en la vecina parroquia La Merced de Buenos Aires, en Imbabura.
Pero, cuando los militares realizan operativos en una zona, los mineros informales se desplazan a otro sector. Por lo que el problema continúa sin una solición definitiva.
