La población otavaleña quiso un cambio de timón para recuperar lo perdido, para darle nueva forma al prestigio de una ciudad que se debilitó en el contexto regional y nacional. La nueva administración estará comandada por una joven mujer que se comprometió con ese propósito. Pero eso implica muchas cosas, como entenderse de la solución de problemas que no han sido superados y que permanecen como incógnitas en esta ciudad con historia, dueña de calificativos que siempre la engrandecieron. La recuperación económica, tránsito caótico, desechos sólidos, agua potable, iniciativas turísticas, comercio ordenado, el tema cultural, son entre otros, los retos de la primera Alcaldesa otavaleña.