Felizmente los ciudadanos ya se han dado cuenta de que varios candidatos que participarán en la próxima contienda electoral de febrero de 2023 son oportunistas, buscan vivir de la politiquería, tranzan a cambio de un plato de lentejas y no tienen vergüenza de ayer aparecer en fotos reverenciando a unos; hoy compartiendo la mesa con otros y mañana quizá, denostando de sus antiguos “amigos” militantes para apoyar a quienes se referían en duros términos en otras ocasiones. Los principios ideológicos, prácticamente han desaparecido del ejercicio político y se han impuesto los camisetazos y los pactos de trastienda con el solo afán de conseguir sus protervos afanes. ¡Cuidado con equivocarse!