Un total de 272 feminicidios se registraron entre el 1 de enero y el 15 de noviembre de 2022 en Ecuador, según un informe revelado este miércoles por la Asociación Latinoamericana para el Desarrollo Alternativo (Aldea).
De las 272 muertes violentas por razones de género, un total de 107 corresponden a femicidio/feminicidio íntimo, familiar, sexual o de otra índole, 8 transfeminicidios y 157 feminicidios por delincuencia organizada.
“Cada 28 horas ocurre un feminicidio en el país. Las cifras siguen aumentando: si 2021 se declaró como el año más violento contra las mujeres en Ecuador, con 197 casos, 2022 superó esta cifra y el año todavía no termina”, indicó Aldea en un comunicado.
Desde el 1 de enero de 2014 hasta el pasado 15 de noviembre, “un total de 1.317 vidas de mujeres y niñas han sido arrebatadas por la violencia machista”, anotó.
Las provincias con mayor número de casos de feminicidios en cifras absolutas son: Guayas (93), Manabí (31) y Esmeraldas (27), mientras que en las provincias de Zamora Chinchipe y Galápagos, no se han registrado casos en lo que va de 2022.
Los transfeminicidios, representan el 2,9 % del total de las muertes violentas por razones de género, se registraron en Guayas (2), Esmeraldas (2), Cotopaxi (1), Santa Elena (1), Tungurahua (1) y Manabí (1).
Los rangos de edad con mayor número de víctimas (83) es el de entre 26 a 35 años, mientras que 33 están entre 36 y 45 años.
En el periodo analizado de 2022, la víctima más joven tenía 3 meses, y la de mayor edad tenía 66 años; la edad más frecuente de las víctimas es de 32 años, indicó Aldea.
Entre los casos más recientes, la Justicia investiga el asesinato de María Belén Bernal, una abogada de 34 años que, en septiembre pasado, llegó a las instalaciones de la Escuela Superior de Policía a visitar a su esposo, el entonces teniente Germán Cáceres, ahora prófugo y principal sospechoso de la muerte de su esposa.
De los 272 feminicidios, se conoce la identidad étnica cultural de 259 mujeres: 228 se identificaron como mestiza, 21 como afrodescendiente y 10 como indígena.
“Suceden los feminicidios ante la inacción del Estado feminicida que no cumple de manera efectiva con sus obligaciones, no garantiza derechos; no previene las violencias de género”, señaló la asociación.
Un Estado, -agregó Aldea- “que no protege a quienes exigen respuestas ante los hechos sufridos, que no previene que las violencias de género sucedan; que no garantiza el acceso a la Justicia perpetuando la impunidad”.
“Pero sobre todo -dijo- que no toma las medidas necesarias para evitar que estos hechos se repitan y, menos aún repara integralmente a las víctimas ni a sus familiares”.
En lo que va del año, 144 niños, niñas y adolescentes quedaron en situación de orfandad por feminicidios. De las 82 mujeres que eran madres, 51 (24,8 %) víctimas de feminicidios tenían uno o dos hijos e hijas; en porcentajes menores se registra tres o cuatro hijos e hijas.
Sobre las edades conocidas de los menores huérfanos por feminicidios, anotó que 61 son menores de edad (menor a 18 años), 25 tienen entre 1 y 5 años, y 14 entre los 6 y 10 años de edad.
El próximo 25 de noviembre, las madres, familiares de víctimas de feminicidios, organizaciones de mujeres y feministas, entre otros participarán en una movilización.
“La lucha es por todas esas madres que aún no obtienen verdad, Justicia y reparación integral, pero también por aquellas que todavía tienen la dicha de disfrutar del amor y de la compañía de sus hijas, de sus madres, de sus hermanas y amigas”, anotó.