Alrededor de 25 colectivos y organizaciones de la provincia se han articulado para generar la campaña ‘Sí por la Vida, por el Yasuní’, con el objetivo de impulsar acciones concretas en beneficio de este ecosistema único y biodiversidad, en especial, se enmarca en la Consulta Popular del próximo 22 de agosto.
En ese sentido, Marcelo Manosalvas, presidente del Frente Popular Unitario (FUT), explicó que desde hace 10 años trabajan en esta causa ambiental junto a la agrupación Yasunidos.
“Fuimos partícipes en la recolección de firmas en la ciudad de Ibarra, donde aportamos con más de 25 mil. En esa época se echó abajo la consulta, pero hoy la justicia nos dio la razón y los ecuatorianos vamos a decidir si queremos conservar el agua, la vida y biodiversidad única del Yasuní”, añadió.
Los 13,45 millones de ecuatorianos empadronados para votar tendrán que decidir dejar bajo tierra el petróleo del bloque 43, también conocido como ITT. Por ende, tendrán que marcar “Sí” o “No” en la papeleta.
Sin embargo, como la explotación de ese bloque comenzó hace casi una década. Por lo que la consulta sobre el Yasuní definirá si continúan las actividades extractivas en ese bloque o si se suspenden y retiran equipos e instalaciones.
Cristina Hugo, representante de Mingas por el Mar Imbabura, comentó las implicaciones que ocasionaría continuar con las actividades extractivas, si gana el ‘No’. “Actualmente, la Amazonía ya no es solo un sumidero de CO2, sino que ahora aporta este compuesto por la deforestación, incendios, extracción petrolera, entre otros problemas.
Por esa razón asegurar la conservación del Yasuní es garantizar la existencia de más de dos mil especies de plantas y arbustos, más de 600 aves y ríos que suministra de agua a Sudamérica”, explicó.
En Imbabura, los colectivos y organizaciones que apoyan la campaña son: Unión de Organizaciones Campesinas de Cotacachi (Unorcac), Unión Nacional de Educadores (UNE), Agendas Juveniles, Despertar Universitario, Asociación Asiris, entre otros.
Miguel Guaichico, presidente de la Unorcac, dijo que “si continuamos con la extracción no habrá un futuro o esperanza para nuestro país, y tenemos que proponer políticas públicas que se enmarquen en el desarrollo, pero que se vinculen al turismo comunitario”.
Es importante mencionar que de ganar el ‘Sí’ en la consulta, Petroecuador tendrá un año para retirar de manera progresiva toda actividad relacionada con la extracción de petróleo en la zona amazónica.
Lo anterior supone un desafío porque, debido a las demoras, habría que retirar costosa infraestructura y apagar pozos petroleros en operación, que están en funcionamiento. Según Petroecuador, el costo de esa decisión se calcula en USD 16.470 millones.
