El tema de contratos con inconsistencias y de última hora es un asunto que debe preocupar a la comunidad. Las Alcaldías, en varios cantones, se han topado con estas novedades, las cuales, no les ha permitido trabajar al 100% durante este primer mes de gestión. Pero lo inquietante es preguntarse sobre la falta de conocimiento, capacidad y ética por parte de las anteriores administraciones al firmar y aprobar contratos, que en lugar de hacerle un bien a la ciudad, detienen su desarrollo. ¿Cómo es posible, que se adjudiquen contratos e incluso anticipos altos, a proyectos que no cuentan con estudios bien hechos? El trabajo para una ciudad debe ser llevado con responsabilidad y honestidad.