Las imágenes que observamos en las redes sociales de cómo los delincuentes ingresan a un supermercado en Esmeraldas y sin que exista motivaciones claras, descargan sus armas y su ira ante una indefensa mujer que recibió más de cinco disparos, es muy indignante. Esa es una muestra de que la declaratoria de excepción en esa provincia verde no atemoriza ni mortifica, porque la descarada delincuencia se pavonea pese a los miedos que, aparentemente, les impone el Estado. La causa sería que la persona que recibió la descarga mortal no accedió, presumiblemente, a pagar puntualmente la denominada vacuna que, de lo que se sabe, es una práctica común en las provincias del norte del país. Qué grave.
- +593 62 955 495
- ventas@gcn.com.ec
- Lun - Vie: 8:00 - 18:00 Sáb: 9:00 - 18:00