El Sisay Pacha Raymi, cuyo nombre significa “Fiesta del Florecimiento” se celebra en el Parque Simón Bolívar, frente al pretil municipal, con distintas actividades. De acuerdo con la organización de la celebración, esta nace con el objetivo de recuperar las fiestas tradicionales y costumbristas del pueblo Kichwa Otavalo, en estricto apego al calendario solar.

Poesía en honor a la Pachamama
Las actividades comenzaron a desarrollarse desde el 26 de marzo con el evento de poetas y escritores de la lengua materna kichwa y español, en el que destacaron estudiantes de distintas instituciones educativas de la urbe de Otavalo e invitados especiales.
Rafael Maigua, organizador del Sisay Pacha Raymi, destacó que la poesía es un aspecto fundamental que ayuda a la inspiración de los jóvenes, algo que buscaron fortalecer con esta actividad.
Así, los más jóvenes rindieron homenaje a la Pachamama con poemas y declamaciones que concientizaban sobre la importancia de la protección de la misma y llamaron a la reflexión.
Además, hasta mañana continuarán efectuando las actividades de la programación por el ‘florecimiento’.
Fomentarán el arte
De igual manera, ayer, 27 de marzo de 2025, se realizó un concurso de dibujo artístico, en el que también participaron estudiantes de establecimientos educativos, desde séptimo de básica, hasta tercero de bachillerato.
Hoy, 28 de marzo, también, el Parque Bolívar se llenará de colores y expresiones artísticas con la exposición y demostración de maestros plásticos en arte y pintura.
Y, para culminar la agenda cultural de la celebración, el Tullpuy Pacha será la actividad que cerrará con broche de oro con el muralismo en vivo. Se trata de una muestra de arte en tiempo real en la que diez artistas invitados pintarán lienzos desde cero.
Calendario andino
Se celebra el equinoccio del 21 de marzo, que marca el florecimiento y el fin del tiempo femenino, para dar paso al comienzo del tiempo masculino, en que “Inti Yaya (Padre sol) regresa desde el Sur para ayudarnos a madurar los frutos de la chakra”.
En la comunidad kichwa urbana buscan recuperar el respeto a las fechas tradicionales y sagradas para los pueblos andinos.
Así, dan inicio al nuevo ciclo agrícola y espiritual que marca el inicio del año andino.