El centro de salud de Huaca ha asumido un rol activo en la promoción de prácticas materno-infantiles humanizadas en Carchi, en coordinación con el Hospital General Luis G. Dávila de Tulcán. En el marco de la normativa ESAMyN (Establecimientos de Salud Amigos de la Madre y el Niño), profesionales de Huaca organizan recorridos guiados con mujeres embarazadas por las instalaciones del hospital, con el fin de garantizar una experiencia informada y respetuosa del proceso de parto.
Recorridos educativos
Estas visitas permiten a las gestantes conocer áreas clave como la emergencia, el centro obstétrico, la sala de psicoprofilaxis y el alojamiento conjunto.
El objetivo es reducir la ansiedad, fomentar la confianza en el sistema de salud y difundir los beneficios del parto humanizado. El acompañamiento incluye orientaciones sobre los derechos de las madres, como elegir la posición del parto y estar acompañadas durante el trabajo de parto.
Formación con enfoque humano
Durante el recorrido, el personal hospitalario y del cantón Huaca capacita a las embarazadas sobre signos de alerta, lactancia precoz, apego inmediato y cuidado del recién nacido.
Esta labor educativa es posible gracias al trabajo coordinado de obstetras, enfermeras y promotoras comunitarias, que refuerzan el acceso a información clara y oportuna. El vínculo entre primer y segundo nivel de atención fortalece la respuesta local ante emergencias obstétricas.
Marco de la normativa
La certificación ESAMyN, vigente desde 2016, busca garantizar atención integral y de calidad durante el embarazo, el parto y el posparto. Inspirada en la iniciativa global de la OMS y UNICEF, prioriza prácticas respetuosas, seguras y culturalmente pertinentes.
Según el MSP, en Ecuador, el Hospital Luis G. Dávila fue certificado el 19 de junio de 2023, siendo el único en Carchi con esta distinción.
Modelo replicable
El trabajo del centro de salud de Huaca es una muestra del impacto que tienen las acciones comunitarias bien articuladas con el sistema hospitalario.
Este modelo territorial podría replicarse en otras zonas rurales para reducir brechas en atención materna y neonatal, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.