Las calles de Ibarra sintieron el peso de una frase: “Viva la unidad del campo y la ciudad”. Las comunidades de Pueblo Kichwa Karanki realizaron una marcha pacífica en el marco de las movilizaciones por la eliminación del subsidio al diésel.
El punto de encuentro, este jueves 25 de septiembre fue en el polideportivo del barrio Los Ceibos. Dirigentes y comuneros, con banderas y carteles, tuvieron claro el objetivo del día: recorrer las calles en apoyo a la lucha del pueblo indígena, que se mantiene en resistencia.
Lenin Farinango, presidente del Pueblo Kichwa Karanki, expresó: “Luego de la asamblea, se decidió hacer presencia en la ciudad e invitar a los compañeros de este sector para que se sumen. No realizamos vandalismo ni terrorismo. Todos somos los afectados con la crisis. Este día fue de resistencia”.
La marcha tuvo paso por diferentes puntos de la urbe. El principal fue en la intersección de la avenida Atahualpa, Teodoro Gómez de la Torre y Bolívar. Además, de un recorrido por el mercado Amazonas y sus alrededores.
Educación
Tal fue la relevancia de la actividad, que un grupo de pobladores de las parroquias rurales de Angochagua y la Esperanza fue hasta las instalaciones del Distrito de Educación 10D01 para solicitar la suspensión de las clases presenciales.
La insistencia tuvo una repuesta de la directora distrital, que dio el visto bueno a la petición en forma verbal. Sin embargo, los comuneros esperan que exista un pronunciamiento oficial y escrito, en caso contrario volverán.
El mismo grupo, como parte de la jornada, se movilizó por la avenida Mariano Acosta en camino al Centro de Detención Provisional (CDP) en Ibarra. En este lugar ofrecieron su respaldo de forma simbólica a los retenidos por las movilizaciones en Otavalo.
Situación
En el transcurso de la marcha pacífica, varios locales comerciales y tiendas se vieron obligados a cerrar de manera imprevista. Varios comuneros asintieron que paralicen sus actividades mientras se mantenga el paro.
Así fue el ambiente en las calles de la ciudad de Ibarra. Parte de la población urbana se unió a la medida convocada por el Cabildo del Pueblo Kichwa Karanki y otros observaron con preocupación la situación que se vive.