Todas las expectativas de los comerciantes y emprendedores de Ibarra se concentraron en este feriado, el más largo del año. Según la Dirección de Desarrollo Económico del Municipio de Ibarra, durante estos cuatro días de asueto, se esperaba la visitas, de alrededor, de 200 mil turistas locales y nacionales. Pero ¿Cómo vivió la Ciudad Blanca el Carnaval? Aquí un resumen de las actividades de los últimos días.
En Ibarra
El parque Ciudad Blanca fue el espacio dónde jóvenes, niños y adultos se concentraron para jugar Carnaval. Durante los cuatro días de vacaciones, se observó en las calles como Mariano Acosta, Camilo Ponce y Galo Plaza a familias jugando con agua, anilina y espuma de carnaval.
De igual manera, en los alrededores de la calle Camilo Ponce más de 10 negocios de comida y venta de espuma se apostaron en el sitio.
Doña María Isabel Nipas, comerciante de comida, comentó que durante el fin de semana, logró vender la totalidad de sus productos, por un valor USD 140. Calificó al feriado como positivo en su caso.
De igual manera, Doña Mireya Yandún, comerciante de espuma de carnaval, indicó que hasta el día lunes, logró vender 5 cajas de espuma de carnaval, aunque mencionó que, el año anterior, vendió 8. Sin embargo, comentó que no registra pérdidas en su negocio.
“Las ventas no fueron como el otro año, pero no me quejo, porque si vendimos, no perdimos lo invertido”, comentó la mujer.
De igual manera, Santiago Fuentes, también, comerciante de globos y espuma de carnaval, señaló que los días con más venta fueron domingo y lunes. Mencionó que, en su caso, no logró vender lo esperado, sin embargo, sí recuperó lo invertido.
Las familias se reunieron en este espacio verde de la ciudad, desde el medio día los “carnavaleros” empezaban el juego con agua, espuma, anilina, huevos, entre otros.
José Zambrano, morador de Los Ceibos, prefirió no salir de la ciudad, temía por la seguridad de los suyos. “Nos quedamos en Ibarra, porque nuestra ciudad es tranquila y segura”, dijo.
El Valle del Chota el sitio preferido
Sin duda, el ambiente cálido y a la atención acogedora de los moradores del Valle del Chota, hicieron que sea el sitio favorito de los turistas locales y nacionales en este feriado.
Durante un recorrido por la parroquia de Ambuquí, se constató que el mayor número de turistas que visitó la parroquia fueron de Carchi y Pichincha.
Por ejemplo, don Álvaro Villarca, viajó desde Tulcán hacia el Juncal, un total de 20 miembros de su familia disfrutaron de un día caluroso a las orillas del río Chota.
En el mismo lugar, se encontraba la familia de Vinicio Maldonado, oriundo de Cayambe, prefirió viajar al Juncal por dos razones: la primera por seguridad y la segunda por economía. “El clima y la gente, en el Valle, son muy cálidos. Además, no se requiere de grandes sumas de dinero para pasar un momento ameno con la familia”, aclaró Don Vinicio.
Comercio
En lo que respecta a ventas, los comerciantes indicaron que se vendió, pero un 25% a 30% menos en comparación del año anterior.
Doña Sonia Espinoza, dueña de un restaurante en el Juncal, comentó que uno de los atractivos del lugar son los precios que ofrecen a los turistas. En su local, un almuerzo completo tiene un valor de $3. La comerciante mencionó que las ventas fueron positivas, que no se puede quejar, pero sí esperaba vender un poco más.
Otro punto que era visitado por las familias, fueron las hosterías que se encuentran en la Panamericana Norte o a la entrada de Ambuquí.
En la hostería Fabricio’s que llegó a su capacidad en hospedaje, sobre todo el día domingo y lunes. Más de 100 personas acudieron a la hostería que cuenta con áreas húmedas y piscinas.
“Calculamos que tuvimos un 30% de ventas, se debe a la situación de inseguridad del país. Pero, fue un buen feriado, sobre todo el fin de semana, que recibimos a turistas del Carchi y Pichincha”, comentó la dueña de la hostería.
