Con la finalidad de devolverle su histórica grandeza al pasillo ecuatoriano, el artista plástico otavaleño Fernando Castillo, elaboró una serie de obras gráficas en torno a este género musical, mismas que hoy por hoy se están exhibiendo en la pinacoteca del Centro Intercultural Comunitario Kinti Wasi, también conocido como la Casa del Colibrí.
Reflexión- Fernando Castillo
A criterio del pintor, estas sentidas melodías nacionales han ido perdiendo terreno en las últimas décadas, pues las actuales generaciones prefieren escuchar a agrupaciones o solistas de otras latitudes mundiales.
“Los jóvenes no oyen nuestra música, y este es el motivo principal de esta exposición, rescatar al pasillo, para que comiencen a conocer la música ecuatoriana y se identifiquen con ella”, señaló Castillo.
Reseña
Adicionalmente a esta reflexión, el artista hizo una breve síntesis para este rotativo, mediante la cual relata el nacimiento y evolución del pasillo nacional, desde su aparición hasta nuestros días.
En este contexto, manifestó: “Ha ido evolucionando desde el siglo XVIII hasta la actualidad, en donde es considerado patrimonio cultural del Ecuador. Cabe mencionar que el pasillo proviene del vals europeo. En el siglo XIX, gracias a los poetas de la época, se comenzó a cantar sus letras, dando la forma final a este género romántico. Uno de los más reconocidos es por ejemplo Medardo Ángel Silva, de quien Julio Jaramillo interpretó uno de sus escritos: El alma en los labios”, dijo.
La exposición como tal dio inicio en noviembre, y estará abierta al público hasta el 25 de diciembre, según informó Fernando castillo.
