“El pueblo unido jamás será vencido”, fue la consigna que retumbó en la cabecera cantonal de Ambuquí, donde cerca de 120 moradores se congregaron en una marcha para exigir el retiro de la planta de asfalto ‘Constructora D&T’ y el cese de alrededor de 20 concesiones mineras que operan en la zona.
Estas actividades extractivas, según denuncian los pobladores, estarían afectando la salud, contaminando el ambiente y provocando daños estructurales por las excavaciones en las lomas a más de 2.000 personas

De momento nuestro objetivo inmediato es fuera la planta de asfalto y fin a la minería, y a largo plazo buscamos reformar el estatuto de la Ley de Ordenanza al Uso de Suelo que viabiliza la declaratoria de Ambuquí como suelo minero

El 14 de abril, los habitantes realizaron una paralización en el sector del relleno de San Alfonso. Según según dijo Raquel Flores, dirigente de los barrios de la cabecera cantonal de Ambuquí, la medida fue levantada luego de que llegaron delegados de la alcaldía que “se comprometieron a invitar al alcalde para el jueves 24”
.Además, de otros funcionarios de la Policía Nacional que se “extenderían la invitación a otras autoridades, entre ellas al Prefecto de Imbabura. Sin embargo, aquel día ninguna de las autoridades llegó al lugar. “Retomaremos la paralización el lunes desde las 07:00, en el mismo sitio, además del relleno de San Alfonso, hasta ser escuchados”, advirtieron.
Las Autoridades
Diego Villalba, director de Ambiente del GAD Ibarra, indicó que según la última actualización del Plan de Ordenamiento Territorial y de Uso de Suelo, “la planta de asfalto, al ser complementaria a la industria minera del sector, es compatible”. No obstante, también reconoció que “tras la reforma y según informes de riego y gestión ambiental, la planta debe ser reubicada porque está cerca de una cuenca.”
Villalba recalcó además que la competencia del control ambiental recae sobre el Gobierno Provincial. Destacó, sin embargo, que la planta genera empleo para la localidad.


