El Club de Alto Rendimiento Máquina Congo busca convertirse en un nuevo semillero de taekwondo en la provincia de Imbabura y el país. Niñas, niños y adolescentes de diferentes edades son los que trabajan bajo las órdenes del entrenador Darwin Congo.
El entrenador
Congo, un militar en servicio pasivo, conversó con Diario EL NORTE y explicó cuáles son los objetivos y la misión del club.
“Trabajamos sin fines de lucro. Nosotros somos cumplidores de lo que dicen los estatutos. Trabajamos por la vocación del servicio comunitario. Lo que nos llena es poder ayudar, poder colaborar y poder participar en la formación continua de nuestros jóvenes”, dijo el entrenador.
Añadió que este es un deporte que forma la mente, el cuerpo y el espíritu.
Dos de las figuras
Además de formar buenos seres humanos, también buscan formar deportistas de alto rendimiento y, más de uno, está en ese camino.
Por ejemplo: Matías Criban Mina, de 12 años de edad y quien lleva cuatro años practicando este deporte de puro contacto.
“Me gusta este deporte y me apasiona mucho. Mi objetivo es prepararme de la mejor manera posible para algún día llegar a participar en unos Juegos Olímpicos y llevar hasta lo más alto el nombre de mi club ‘Máquina Congo’ y de mi país”, mencionó Matías.
El fuerte de este joven deportista ibarreño está en sus piernas. Eso se nota y se escucha cada vez que lanza una patada durante un entrenamiento. Kerly Chamorro es otra de las deportistas que forma parte de este club. La taekwondoca, de 15 años de edad, lleva más de un año entrenando. Kelry explicó: “Lo que principalmente aprendemos es la disciplina; aprendemos mucho a controlar nuestras emociones y lo que es la defensa personal.