La Fiscal General del Estado, Diana Salazar, comunicó en un video en redes sociales, el embarazo de su segundo hijo y dijo enfáticamente que esta situación “cambia las reglas de juego”, frente al juicio político en su contra. Y sí que las cambia, ya que esta causa seguida en la Asamblea Nacional era impulsada por el correismo, alegando incumplimiento de funciones. Aunque la Fiscal dijo que no rehúye a este proceso, en la legislación ecuatoriana no se contempla “que una mujer en estado de gestación enfrente un juicio político, con el estrés que este implica”, agregó. La respuesta fue inmediata y en menos de 24 horas, el Consejo de Administración Legislativa (CAL) decidió, con cinco votos, suspender el juicio político. Llama la atención el argumento de la fiscal de buscar tener un embarazo en paz, pero seguirá al frente de casos como Metástasis, en donde está sometida incluso a un estrés mayor. Si es por salud, debería dar un paso al costado.
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