La situación financiera del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) es un reflejo preocupante de la crisis que atraviesa la entidad. Con una deuda total de USD 1.340 millones a agosto de 2024, el IESS ha luchado por mantener sus compromisos con los prestadores de salud externos. Aunque se han pagado USD 334 millones en lo que va del año y se proyecta cancelar otros USD 328 millones hasta diciembre, los proveedores continúan enfrentando retrasos significativos. Casos como el de la matriz de SOLCA en Cuenca, que dejó de atender a pacientes del Seguro Social por falta de pagos, ponen en evidencia las consecuencias directas de esta crisis. Aunque se han abonado USD 2 millones de los USD 6 millones adeudados, la reanudación de la atención aún depende del cumplimiento total de los pagos.
Es fundamental que el IESS y el Gobierno encuentren soluciones urgentes y sostenibles.